SD Compostela: La etapa dorada.

La historia de la Sociedad Deportiva Compostela nace en 1962. En sus primeros años el club santiagués alterna categorías pero sin consolidarse en ninguna de ellas, sin embargo la llegada de José María Caneda a la presidencia en 1988 supone el impulso necesario para la entidad. Con Fernando Castro Santos en el banquillo se consigue algo histórico, un ascenso fulgurante que le lleva desde Tercera hasta Primera División en apenas cinco años. Asciende a Segunda B en la 89/90, a Segunda en la 90/91 y a la élite en la 93/94. Repasamos la etapa más gloriosa del Compos.

En la retina de los aficionados de la «esedé» siempre estarán dos partidos. Uno es el desenlace de la fase de ascenso ante un muy favorito Badajoz que acumulaba más de medio año sin conocer la derrota. En Santa Isabel, con 12000 espectadores en un estadio con aforo para poco más de 3000, cayeron los pacenses (3-1). El Compos lograba así ascender a la categoría de plata por primera vez el (23/06/1991). Otro es el desempate en una dramática eliminatoria ante el Rayo Vallecano de Hugo Sánchez y David Vidal, 1-1 en Vallecas y 0-0 en territorio gallego. En el Carlos Tartiere de Oviedo, campo neutral con miles de santiagueses en sus gradas, se alcanza el sueño de subir el último peldaño del fútbol nacional con otro inolvidable 3-1 el (1/06/1994).

1994 – 1998: Un Compos de Primera

La temporada del ascenso a Primera llega con el estreno de la nueva casa de la SD Compostela, el Estadio Multiusos de San Lázaro. Allí transcurrió la etapa más dorada del club azul y blanco, entre 1994 y 1998. En el curso inaugural en la élite (94/95) el equipo logra la permanencia en el decimosexto puesto con 34 puntos en un fútbol en el que las victorias todavía sumaban 2. Vence por ejemplo los dos derbis al RC Celta (1-2 / 2-0), equipo talismán contra el que no pierde a lo largo de este lustro, y consigue que el campeón Real Madrid no le supere ni en Santiago ni en el Bernabéu (1-1).

En su debut entre los grandes demostró que, como declaró su presidente, no venía de comparsa. Pero, sin ninguna duda, en la 95/96 evidenció que llegaba para quedarse con la mejor clasificación histórica. Fernando Vázquez llegó para sustituir a su tocayo Castro Santos y la SD comenzó la Liga sorprendiendo a sus dos rivales autónomicos, 0-1 en Vigo y un increíble 4-0 a un Dépor que venía de levantar Copa y Supercopa. Los santiagueses, que también derrotaron al Barça (2-1) en feudo propio, concluyeron la primera vuelta como subcampeones de invierno con la friolera de 42 puntos. Aunque muchos hablaban ya de «EuroCompos», el equipo padeció una lógica recaída para concluir en una muy meritoria décima posición con 59 unidades.

Sin el sensacional comienzo del año anterior pero con un desenlace similar, resultado de una trayectoria más equilibrada, el Compostela vuelve a solventar con creces sus objetivos en la 96/97 donde concluye, sin apuros, en mitad de la tabla: 11º con 53 en el casillero. Clave su dupla atacante formada por un ya habitual Ohen, pichichi del equipo con 17 tantos, y Penev, fichaje estrella, que sumó otros 16. El delantero búlgaro llegaba del vigente campeón Atlético de Madrid que, por cierto, también mordió el polvo de San Lázaro (2-1) en la tempranera segunda jornada. Solo un mes después, era 12 de octubre de 1996, el feudo picheleiro fue testigo de uno de los mejores goles que se recuerdan en el campeonato. Ronaldo Nazario constató sus mejores virtudes – potencia, velocidad, regate y tiro – durante 50 metros en los que se fue de todo lo que salió al paso.

Y de la misma forma que llegó, se fue. Un gran final de curso 97/98, ya con Gabi Leis en el banquillo en este tramo definitivo donde sumó 10 sobre 12 con goleada en Riazor (26) en el pack, no fue suficiente para evitar la promoción de permanencia: 17º con 44 puntos, a solo uno de la salvación. Al contrario de lo que había sucedido cuatro años antes, tocaba defender puesto en la élite. El rival: Villarreal CF. El 0-0 en El Madrigal y la vuelta en casa invitaban al optimismo, sin embargo el valor doble de los goles (1-1) lo tumbó. Sin tercer partido de desempate, ya extinto, la SD Compostela descendía a Segunda División y ponía fin a cuatro temporadas donde la ciudad de Santiago disfrutó del mejor fútbol.

Hall of Fame. José María Caneda en el palco. Castro Santos y Fernando Vázquez en el banquillo. Iru y Falagán en portería. Villena, Mauro, Tocornal, Bellido y Nacho en defensa. Passi, Fabiano, Lekumberri, Tato Abadía, José Ramón, Llorente y Popov en medio. Christensen, Penev y Ohen arriba. Gracias.

Fernando Romero de Paz (@FerRomeroDP)


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